¿Cómo afectará a los precios la prohibición de vender apartamentos sin acabados?

«Los apartamentos caros se comenzaron a vender con acabados terminados hace algunos años, y esto no asusta a los compradores, al contrario, se percibe como una ventaja clara», – considera Ekaterina Rumyantseva, experta en bienes raíces de la categoría 'lujoso'.

Ekaterina Rumyantseva
Experta
Presidenta del consejo de directores de Kalinka Group

La entrega de viviendas nuevas en los segmentos de lujo y de luxe con acabados listos para vivir se ha convertido en una tendencia durante los últimos dos años. Según datos de abril de 2017, de los 54 objetos expuestos en 10 se ofrecen apartamentos y viviendas con acabados completos, representando el 18,5% del total de la oferta primaria. Todos estos son proyectos de la empresa Vesper, así como algunos proyectos de Barkli y Capital Group. Para clientes del segmento de élite, la presencia de acabados es una ventaja sin duda.

Hoy en día, el costo promedio de acabado ofrecido por los desarrolladores inmobiliarios en segmentos altos oscila entre 30 mil y 150 mil rublos por metro cuadrado. Si el propietario de una vivienda nueva realiza el trabajo de renovación por sí mismo, el costo de las obras de acabado (con materiales) aumenta entre un 20 y 25 por ciento.

Los desarrolladores logran ahorrar en acabados optimizando sus gastos a gran escala: compran materiales de construcción y acabados al por mayor, obtienen buenas rebajas de los proveedores de equipos gracias a volúmenes significativos de pedidos y utilizan sus propias brigadas de reparación en los proyectos.

Gastos por acabado de apartamento realizado por el desarrollador

Clase de vivienda

Costo del acabado

Business+

12 a 25 mil rublos por metro cuadrado

Premium

27 a 35 mil rublos por metro cuadrado

De luxe

45 a 150 mil rublos por metro cuadrado

En Europa y América, la oferta de viviendas caras sin acabados ante los compradores potenciales es comparable a intentar alimentar a invitados con productos semielaborados en un restaurante de alto nivel. Los desarrolladores de Moscú intentan acercar las regulaciones y leyes del mercado a estándares internacionales. Invitan a reconocidos estudios arquitectónicos y diseñadores con nombres, lo que en condiciones privadas puede aumentar significativamente (a veces incluso decenas de veces) el costo del proyecto para el cliente.

Hay otro argumento sólido a favor de comprar un apartamento con acabados: al diseñar el interior por uno mismo y según sus preferencias personales, los propietarios a menudo cometen errores que más adelante pueden dificultarles vender la propiedad al precio esperado. Un ejemplo de esta situación son los famosos 'palacios del rublo' y apartamentos provenientes de los años 90, que al ponerse en venta impactaron al mercado de inmuebles.

Además, al comprar un apartamento con acabados, el propietario se libera de tener que soportar durante años la polvareda y basura en las áreas comunes, temblar ante el sonido del martillo y la perforadora, y esperar ansiosamente a que por fin compren y remodelen las últimas viviendas vacías.

No hay razones para temer que prohibir la venta de inmuebles sin acabados haga que los precios suban injustificadamente. Hoy no es la situación en la que los desarrolladores puedan fijar libremente políticas de precios: el riesgo de perder frente a competidores más visionarios es demasiado grande. Además, incluso si suponemos un escenario tan utópico como una prohibición gubernamental de vender viviendas sin renovación, una alternativa competitiva sería el mercado de alquiler. Especialmente considerando la intención del gobierno de reintroducir los 'hogares rentables' en el mercado e incluso comenzar esta iniciativa con la salida de los primeros proyectos similares en la capital rusa.