Cómo mantenerte fresco sin aire acondicionado

Nos asociamos con expertos de Upside Down para reunir seis consejos útiles sobre cómo enfriarse sin aire acondicionado.

Usa persianas para evitar la luz solar

En los meses más calurosos, alrededor del 75% de la luz solar que cae sobre una ventana normal se convierte en calor. Si colocas tu mano sobre una ventana en verano, sentirás inmediatamente cuánto calor hay en el vidrio.

Usar persianas, toldos o cortinas proporciona una protección adicional contra el calor. La luz se reflejará y no habrá oportunidad de que toque el vidrio y transmita calor a tu hogar.

Para maximizar la frescura, cierra las persianas o cortinas temprano por la mañana. Es mejor mantener el calor fuera del espacio desde la mañana para que tu casa permanezca fresca durante los períodos de calor intenso. Si deseas disfrutar de la luz natural, abre las persianas en el lado sombreado del edificio.

También puedes usar plantas como protección natural contra la luz solar y el calor, o películas de vidrio espejo. Estas películas son fáciles de comprar en tiendas de artículos para el hogar y se pueden aplicar por uno mismo.

Usa ventiladores de techo y portátiles

Aunque el enfriamiento central por sí solo puede ser costoso, los ventiladores de techo y portátiles ofrecen una solución mucho más económica. Los ventiladores de techo funcionan sin esfuerzo adicional. Dirigen aire fresco hacia abajo y, gracias al flujo constante de aire, tu casa no se vuelve opresiva ni húmeda.

Para algunos de nosotros, enfriarse simplemente significa mover aire. Pequeños ventiladores portátiles también son muy prácticos. Colócalos donde quieras y obtendrás un flujo directo de aire fresco. Si colocas un cubo con hielo o una tela refrigerada frente al ventilador, puedes crear un aire acondicionado barato. El ventilador dirigirá ese aire fresco directamente a tu cara.

Mantente hidratado y come alimentos frescos

El agua es clave para enfriarse. Cuando te sobrecalientas, la transpiración ayuda a reducir la temperatura de la superficie corporal. Sin embargo, una transpiración excesiva puede causar deshidratación en condiciones de calor.

Por lo tanto, beber agua regularmente te ayudará a mantenerte fresco y con energía. En un día caluroso, bebe aproximadamente ocho tazas de agua de 8 onzas. Quizás incluso necesites beber un galón o más si estás activo.

Además, intenta comer alimentos con alto contenido de agua, como sandía o pepino. Alimentos frescos te ayudarán a mantener la frescura. Evita alimentos pesados, incluyendo carne roja.

Coloca toallas frías en puntos de pulso

Puedes enfriar rápidamente tu cuerpo usando una toalla fría en los puntos de pulso clave. Simplemente colócala sobre las áreas más sensibles, como muñecas, nuca, axilas o rodillas, tobillos y ingle.

Estas son áreas donde los vasos sanguíneos están más cerca de la superficie de la piel, y un toque frío elimina rápidamente el calor excesivo. Incluso usar un spray refrigerado puede ayudarte a mantener la humedad en la piel, sin perder agua por transpiración. Piensa que una ducha fría con agua hace lo mismo que la transpiración. Simplemente conservas el agua que normalmente se pierde en forma de sudor. Eso es un beneficio para la hidratación.

Apaga las luces

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