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¿Por qué Maya Plisetskaya a los 70 años lucía mejor que las celebridades de los 30?

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La belleza no está en la lucha contra la edad, sino en la armonía contigo mismo

En el día de sus 70 años, Maya Plisetskaya debutó en el número "Ave Maya", creado para ella por Maurice Béjart. Imaginen: una ballerina que podría ser abuela, aparece en escena y eclipsa con su gracia a muchas estrellas contemporáneas. ¿Cómo logró esto?

Lo principal de la nota:

  • Plisetskaya bailó hasta los 65 años, e incluso a los 70 salió a escena, impresionando a todos con su gracia;
  • Al igual que todas las asténicas, Maya Mikhailovna era delgada como un sauce, con un esqueleto ligero y un cuello de cisne;
  • "No se puede escapar de las arrugas... Pero un anciano que parece joven o una anciana que se ve joven es ridículo";
  • Maya Plisetskaya afirmaba que mantenerse en forma le ayudaba constantemente la regla dorada: comer lo menos posible y moverse lo más posible;
  • Maya Mikhailovna no tenía costumbre de ocultar su edad, al contrario, se sentía orgullosa de la vida vivida.

La genética como capital inicial de la belleza

A Maya Plisetskaya le tocó tener un tipo corporal asténico, también llamado "fisonomía de ballet". Como todas las asténicas, era delgada como un sauce, con un esqueleto ligero y un cuello de cisne, rasgos faciales finos y una frente alta. La naturaleza le dio una base ideal, pero el verdadero secreto no estaba ahí.

Conociendo la dieta de las ballerinas, uno podría pensar que su figura era resultado de una estricta dieta, pero en realidad no tenía sobrepeso gracias a su alto metabolismo. Es un caso raro donde la genética ayuda a una persona durante toda su vida.

Foto del sitio: peopletalk.ruFoto del sitio: peopletalk.ru

Movimiento como filosofía de vida

Plisetskaya nunca se acostó en el sofá. "Una estricta disciplina alimentaria era parte de la profesión, no una dieta temporal", - mantenerse en forma le ayudaba la regla dorada: comer lo menos posible y moverse lo más posible. Este principio lo siguió cada día durante décadas.

Cuando sus compañeras ya estaban en casa con sus nietos, a los 70 años Plisetskaya salió nuevamente a escena. En 1995, en su día de 70 años, interpretó el número "Ave Maya", creado especialmente para ella por el maestro de ballet francés Maurice Béjart. Imaginen la carga: ensayos, estiramientos, trabajo frente al barre. En una edad en que otros consideran cada escalón.

Aceptar la vejez como la mayor sabiduría

Este es el secreto principal. "No se puede escapar de las arrugas... Pero un anciano que parece joven o una anciana que se ve joven es ridículo", decía Plisetskaya. No temía envejecer ni intentaba verse más joven.

Maya Mikhailovna no tenía costumbre de ocultar su edad, al contrario, se sentía orgullosa de la vida vivida y del hecho de haber conservado una belleza física. Cuando una mujer no lucha contra el espejo, sino que se entiende con él, esto se nota desde lejos.

Alimentación sin fanatismo

La frase más famosa de Plisetskaya sobre la alimentación suena directa: "¡No comer!" Justo esta parte - "puedes comer todo, pero poco a poco" - formaba la base de la filosofía alimentaria de la ballerina. Sin dietas extremas ni ayunos.

En juventud, Plisetskaya se maquillaba exclusivamente para los espectáculos. Para no lastimar la piel innecesariamente, en la vida prefería no usar maquillaje en absoluto, ya que su apariencia natural era brillante. Incluso cuando se reunió con el presidente Kennedy, llegó sin maquillaje.

Amor como fuente de energía

Siendo una persona creativa, Plisetskaya sabía sentir y experimentar emociones profundamente. Consideraba que el secreto de la belleza y longevidad estaba en el amor. Con Rodion Shchedrin vivieron 57 años. Plisetskaya misma contaba: "Saben, él todavía me regala flores cada día. Me resulta incómodo decir esto, pero es verdad. Cada día. Toda la vida..."

Cuando una mujer es amada y ama a su vez, esto transforma el rostro mejor que cualquier crema. A Plisetskaya le acompañó alguien que veía en ella antes que en una ballerina simplemente una mujer.

Estilo antes que moda

Plisetskaya reconocía la ropa solo de Pierre Cardin. "Es el estándar del gusto, la fantasía, la belleza... Nunca envejece", decía. Tener tu propio estilo significa no perseguir las tendencias, sino encontrar aquello que te conviene a ti.

Maya Mikhailovna no era alta, su estatura alcanzó los 167 cm. Pero en las fotos parecía más alta de lo que realmente era. En cualquier edad, era delgada y elegante, se mantenía con seguridad y orgullo.

El núcleo interior

Maya Plisetskaya señalaba que no eran las arrugas lo que hacía a una mujer descuidada o desagradable, sino el estado interior, la actitud hacia uno mismo y al mundo. La ballerina vivió arresto y ejecución de su padre, exilio de su madre, prohibiciones para giras. Pero no se rompió.

Cuando una mujer tiene un propósito en la vida, una meta, una pasión - la edad retrocede. Plisetskaya decía: "Nunca quise tener hijos - el ballet fue mi hijo". Una decisión controvertida, pero la autenticidad y coherencia de su naturaleza se notan inmediatamente.

"Todo es muy simple: hay que saber mantenerse a uno mismo. No vale la pena intentar parecer igual que la hija - eso es absurdo e inapropiado", resumía Plisetskaya. Las celebridades modernas deberían prestar atención: la belleza no está en luchar contra la edad, sino en armonizar con uno mismo.

Portada del sitio: peopletalk.ru