Evita estos errores al vender tu casa

Consideremos algunos puntos importantes que deberías tener en cuenta al prepararte para la venta.

Demasiada emoción

Este error puede ser poco obvio, pero es importante no dejar que las emociones te dominen al vender tu casa. Por supuesto, es normal sentirse afectado, especialmente si esta es tu primera venta de propiedad, ya que requirió mucho planificación, ahorro y búsqueda del hogar adecuado para ti y tu familia. Pero intenta ver la venta como una transacción: tú eres el vendedor que ofrece algo a alguien que lo quiere, ya sea un reloj o un sofá. No permitas que las emociones interfieran con la toma de decisiones. Si no eres demasiado emocional, será más fácil asegurarte de que todos los trabajos necesarios en la casa se realicen para aumentar su valor, como reparaciones. Y precisamente esos trabajos ayudan a obtener el mejor precio por tu casa.

No contratar un corredor inmobiliario

Uno de los errores que debes evitar es vender tu casa por tu cuenta. Aunque puede parecer atractivo no pagar una comisión al corredor inmobiliario, ellos realmente simplifican el proceso. Un corredor determinará el valor de tu casa y te ayudará a conseguir la mejor oferta. Además, durante las negociaciones, el corredor puede ayudarte a evaluar si la oferta es realista. Si estás ocupado, un corredor será una excelente ayuda: organizará las visitas abiertas y las inspecciones, permitiéndote concentrarte en tu trabajo y tus responsabilidades diarias.

Poner un precio demasiado alto

Aunque puede tentarte fijar un precio por encima del valor real de la casa, es mejor evitar este error. Un precio demasiado alto puede alejar a los compradores potenciales. Evalúa el valor de tu casa, ten en cuenta las reparaciones realizadas y establece un precio razonable. Un corredor inmobiliario también puede ayudarte con esto. Establecer un precio razonable atraerá más compradores e incrementará el interés en tu casa, lo que mejora las posibilidades de una venta rápida.

No contar con el precio anunciado

Es un error común esperar que se cumpla el precio indicado en el anuncio, especialmente entre los principiantes. Aunque deseas vender tu casa al precio real, es importante dejar espacio para negociar. La mayoría de los compradores hacen ofertas por debajo del precio anunciado, así que tienes la oportunidad de negociar. Sin embargo, no te sorprendas si un comprador ofrece menos del precio publicado: esto es normal. En ese caso, un corredor puede ayudarte a resolver todos los detalles.

No subir fotos en línea

Muchos compradores buscan información sobre la casa en internet antes de visitarla personalmente. Un error de los vendedores es no publicar fotos para que los compradores puedan ver la casa antes de venir a inspeccionarla. Esto puede resultar en menos visitas y una venta más lenta. Por lo tanto, es obligatorio publicar imágenes. Al hacer las fotos, haz buenas ángulos y si es posible, usa luz natural. Si puedes ofrecer una vista 360 grados de la casa, esto ayudará a los compradores a sentirse como si estuvieran allí y les motivará a venir a verla.

No informar sobre problemas

Independientemente de si los problemas en la casa son menores o graves, es importante mencionarlos al venderla. Una opción es vender la casa “tal cual”, dejando que el comprador decida si quiere comprarla con los problemas existentes. En algunos estados, esto es obligatorio y no informar correctamente de las deficiencias puede llevar a litigios. En cualquier caso, se recomienda hacer una inspección de la casa y ser honesto con los compradores potenciales.

Ya sea que estés comprando o vendiendo tu primera casa, aquí encontrarás toda la información sobre los precios promedio de inmuebles en la zona de Milpitas. Recuerda que vender una casa puede ser una tarea complicada, pero obtener la ayuda adecuada y evitar errores hará que el proceso sea mucho más sencillo para ti y tu familia. El momento de la venta depende del estado del mercado: comprador o vendedor. Quizás sea mejor esperar un precio más favorable, pero mantente realista y resuelve los problemas a medida que surgen. Y recuerda, lo bueno se logra con esfuerzo y a menudo vale la pena — incluso si tienes que trabajar un poco más para alcanzar tu objetivo.