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Cómo organizar los armarios de la cocina de una vez por todas
Y además deshacerse de cosas innecesarias
En la cocina se guardan muchos objetos pequeños, de los que incluso puede que no recuerdes la existencia. Vamos a ver cómo organizar los armarios y mantener el orden siempre.
¿Por qué es mejor no posponer la limpieza?
- Ahorras dinero. A menudo compramos un tercer vaso medidor solo porque no recordamos la existencia de los dos anteriores. Ahora siempre sabrás qué y dónde tienes.
- Y tiempo. Ya no tendrás que perder tiempo buscando los objetos necesarios. Esto facilitará el proceso de cocinar.
- Es más cómodo para toda la familia. Nadie más preguntará dónde están las sartenes grandes o los rodillos. Además, limpiar es mucho más fácil cuando cada cosa tiene su lugar.

Paso 1: vaciamos los armarios
Saca todos los objetos de los armarios y prepara inmediatamente dos contenedores: uno para la basura y otro para las cosas que puedes donar o vender. Clasifica todo el vajilla y accesorios y deja en la cocina solo lo que planeas utilizar.

Paso 2: clasificamos los objetos
Antes de volver a colocar los objetos en su sitio, piensa bien en todo. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a decidir las categorías y la lógica del almacenamiento.
Coloca los objetos donde más los uses
Por ejemplo, si siempre añades especias a los platos, colócalas lo más cerca posible de la estufa. Y si no quieres tener que buscar galletas para los niños cada vez, colócalas en la estantería inferior — para que todos los miembros de la familia puedan alcanzarlas (aunque aquí hay que confiar en su honestidad y creer que no se comerán todo de inmediato).

No guardes comida y vajilla en el mismo lugar
El almacenamiento debe tener una lógica que tú mismo establezcas. Por ejemplo, la comida se guardará en el armario izquierdo, y la vajilla en el derecho. O la comida se puede colocar en lo alto, y la vajilla en lo bajo.
Si la cocina es pequeña y solo hay un armario, delimita en su interior secciones separadas para el almacenamiento.

Clasifica los objetos en categorías
Hay muchas opciones: por ejemplo, una estantería con comida puede ser para conservas, y otra para cereales. O puedes separar los productos que usas frecuentemente de los que usas raramente. También es útil separar los alimentos saludables de los menos saludables.
La vajilla se puede clasificar por tipo, material o color — como más te convenga. Elige las categorías que te funcionen y nada romperá el orden en los armarios.

Reserva una estantería para objetos que usas diariamente
Pueden ser tus tazas, platos o bandejas favoritas, con los que sirves la comida cada día — colócalos lo más cerca posible. Y los copas, con las que bebes solo en fiestas, puedes guardarlos más lejos o más arriba.
Se cuidadoso
Coloca los objetos de manera que todo sea visible y puedas acceder fácilmente a lo que necesitas. Es mejor colocar los cuencos y platos por tamaño: los más grandes abajo, y luego en orden decreciente.
No intentes guardar todas las cosas en un solo armario: si las estanterías están completamente llenas, definitivamente no podrás mantener el orden. Algunos objetos se pueden trasladar a otro lugar.

Paso 3: colocamos todo en su sitio
¿Qué guardar en los armarios superiores?
- Comida. Reúne todos los ingredientes necesarios para cocinar (especias, salsas, aceites, cereales) en los armarios sobre la superficie de trabajo, para que siempre estén al alcance de la mano.
- Platos y tazas. Coloca toda la vajilla que usas con frecuencia encima de la lavavajillas o de la secadora — es más práctico.
- Contenedores. Guárdalos encima de la superficie de trabajo, donde normalmente desempaquetas las compras o clasificas los productos.
- Libros de cocina. Puedes hacer una estantería separada si te gusta usar recetas de libros en lugar de internet.

¿Qué guardar en los armarios inferiores?
- Electrodomésticos. Te será más cómodo sacarlos durante la preparación de los platos. Los objetos que usas muy a menudo se pueden trasladar a la encimera.
- Ollas, sartenes y bandejas. Es mejor guardar las sartenes verticalmente y de lado para ocupar el mínimo espacio. Lo mismo aplica para las tapas. Para ellas puedes comprar un contenedor especial.
- Cuencos, tazones y tablas de cortar. Guárdalos cerca del fregadero o de la lavavajillas.
- Productos de limpieza. Puedes colocarlos en el armario debajo del fregadero y preferiblemente en la estantería inferior — en caso de derrames. Intenta no almacenar productos químicos cerca de la vajilla y la comida — es peligroso.

Paso 4: mantenemos el orden
Acuerda con los miembros de la familia seguir el orden. Cuéntales o escribe en una hoja de papel qué y dónde está. Al principio puedes colgarlo en la nevera para que nadie se olvide de nada.
Siempre comprueba durante la limpieza si todo está en orden en las estanterías. Es mucho más fácil corregir pequeños errores de vez en cuando que volver a organizar todo desde cero.

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