Reparación de tejado con ruberoid

Normalmente, la vida útil sin mantenimiento de una cubierta adherida oscila entre 5 y 10 años. El revestimiento de impermeabilización suele sufrir daños mecánicos por el tránsito de diversas organizaciones y personal de mantenimiento: personas que supervisan las cajas de ascensores, montadores de estructuras publicitarias, antenas, aires acondicionados, etc.

Originalmente, el ruberoid no estaba diseñado para usarse en tejados accesibles, y se previeron pasarelas o caminos peatonales para el tránsito. Desgraciadamente, el bajo precio del material ha provocado su amplia difusión incluso en cubiertas que, en teoría, deberían estar aisladas con otros materiales, como las membranas de PVC o TPO, que poseen características de resistencia completamente diferentes y superiores.

Otro gran problema de las cubiertas adheridas es la formación de hielo, y más específicamente, el método de su eliminación: en Rusia, esto se hace normalmente de forma mecánica con una espátula de acero. A menudo, este método de limpieza de tejado conduce a la eliminación del revestimiento completo de la cubierta junto con el hielo. Para proteger las cubiertas adheridas planas del hielo, se recomienda el uso de cables térmicos especiales que mantienen la temperatura de la superficie del tejado por encima de cero durante el periodo frío del año.

Procedimiento de reparación

Antes de instalar nuevo material adherido en rollo, es necesario retirar el antiguo, que ha perdido adherencia al soporte o presenta daños mecánicos, desprendimientos, etc. Además, es necesario eliminar todo el residuo de la cubierta plana, cuya acumulación es considerable debido a características de diseño: presencia de parapeto y pendiente baja.

El parapeto dificulta la eliminación de hojas, ramas y otros residuos. Sin embargo, al reparar tejados con material adherido, la presencia de estos objetos bajo el revestimiento de ruberoid invariablemente provoca la pérdida de integridad de la impermeabilización o la formación de burbujas de aire en el futuro.

La reparación puede ser amplia o local. En la reparación local, solo se adhiere la capa superior del material, mientras que la base consiste en dos o tres capas anteriores de ruberoid. En la reparación amplia, cuando los trabajos se realizan no en una sola fuga, sino en una zona completa, la adhesión del ruberoid se realiza según la tecnología estándar: primero 1-2 capas de subcubierta RPP, luego una capa final superior RKP.

La adhesión se realiza normalmente con masilla bituminosa o simplemente con bitumen fundido. La masilla es preferible, ya que contiene un complejo de plastificantes y otros aditivos que mejoran la adherencia y otros parámetros del revestimiento de tejado, especialmente en condiciones frías o húmedas.

Además, la masilla se entrega lista para usar en cubos de acero, sin necesidad de calentamiento previo antes de la aplicación. Esto aumenta significativamente la velocidad de los trabajos de tejado, aunque también incrementa el costo en comparación con el bitumen común.

Para garantizar la impermeabilización de elementos verticales del tejado —parapetos, pilares de hormigón para equipos o anuncios, y otras estructuras—, el revestimiento de impermeabilización se extiende hasta una altura de 40 cm. Después de la adhesión con la mezcla bituminosa, se sujeta con una plancha de sujeción especial, firmemente fijada al pie del parapeto. Asimismo, las zonas de instalación de los colectores de aguas pluviales y otros puntos críticos que requieren corte del ruberoid para su montaje se refuerzan con trozos del mismo material en dos o tres capas sobre el corte.

Al instalar el ruberoid en grandes lonas, es esencial respetar un solapamiento de al menos 15 cm entre los rollos adyacentes. No olvide que los materiales bituminosos presentan una gran contracción en los primeros meses de uso, y la ausencia de solapamiento puede provocar una pérdida de estanqueidad de la junta, lo que a su vez puede causar una fuga del tejado.