Aislamiento de paredes con poliestireno

Una de las más antiguas y más extendidas es el aislamiento con poliestireno expandido.

A pesar de que en la mayoría de países del mundo el poliestireno se utiliza únicamente como material de embalaje, por ejemplo, para electrodomésticos o antigüedades (en forma de granulos), en Ucrania ya hace tiempo que ha ocupado el lugar de aislante más popular. El poliestireno se utiliza para aislar paredes, techos planos, suelos bajo hormigón y cimientos. En este artículo se tratará sobre el aislamiento de elementos de fachada con placas de poliestireno.

Pared trilaminar

La solución constructiva más común para elementos de fachada externos con uso de poliestireno es la pared trilaminar. Se trata de una estructura de pared, totalmente o parcialmente construida con elementos pequeños (ladrillos, bloques de hormigón ligero, piedra, bloques de cerámica). La capa de poliestireno se sitúa entre la capa exterior y la interior, formando una estructura multicapa.

Las filas interior y exterior de ladrillos se unen entre sí mediante conectores flexibles o una malla de refuerzo con un espaciado de 0,6 a 1,2 metros. En el primer caso, las placas de poliestireno se colocan sobre conectores previamente fijados en la capa interior; en el segundo, se instalan de forma que apoyen sobre la malla de refuerzo.

En el caso de implementar una pared trilaminar, las placas de poliestireno se insertan en la pared paralelamente a la construcción de toda la estructura. Es decir, con esta solución constructiva, el poliestireno solo puede usarse en nuevas construcciones. Si se trata de una reconstrucción de un edificio antiguo no aislado, el uso del poliestireno es posible en un sistema de fachada húmeda.

Fachada húmeda con revoco

La forma más común de mejorar las fachadas de edificios antiguos, incluso aquellos de valor histórico, es la instalación de una fachada húmeda con revoco. Este método permite aumentar la eficiencia energética de la construcción, conservar el aspecto original exterior del edificio y alargar la vida útil de las paredes deterioradas.

La esencia del método consiste en fijar primero una placa de poliestireno o lana mineral a la pared. La fijación se realiza mediante una mezcla de cemento adhesiva. A las 24 horas de fijación, el material aislante se refuerza adicionalmente en cinco puntos por placa mediante tornillos especiales de cabeza plana.

A continuación, el poliestireno se cubre con una capa de imprimación y adhesivo, en la que también se incorpora una malla de refuerzo polimérica. En la etapa final, se aplica una capa decorativa de revoco cementicio sobre esta estructura multicapa.

Aislamiento de la parte subterránea de paredes y cimientos

El poliestireno es prácticamente inerte al daño causado por la humedad, por lo que puede usarse por debajo del nivel del suelo. El material se adhiere a una capa de aislamiento bituminoso, que cubre las zonas subterráneas de las paredes y cimientos. Aunque no es necesario un fijado adicional del poliestireno, en ciertos casos se fija en una o dos zonas mediante los mismos tornillos de cabeza plana.

Una buena alternativa al poliestireno granulado en la construcción de cimientos es el poliestireno extruido, que se diferencia del poliestireno tradicional por su estructura celular cerrada, que mejora sus propiedades de aislamiento térmico y resistencia mecánica.