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Instalación y fijación del encofrado
El encofrado se instala en la parte aérea del fundamento, por debajo del nivel del suelo, con la zanja o fosa como molde. El encofrado para el fundamento debe ser resistente y firmemente asegurado; de lo contrario, sus paredes se romperán bajo el peso del hormigón vertido y todo el trabajo se echará a perder. Las paredes no deben tener grietas ni agujeros que permitan la fuga del caldo de cemento.
El encofrado utilizado para una fundación de losa soporta especialmente grandes cargas.
Al construir el encofrado para una fundación de cinta, no olvide prever aberturas para instalar en el futuro tuberías de agua potable, alcantarillado o cualquier otra red. Normalmente se instala una caja de madera de 200 x 200 mm y de longitud igual al ancho de la fundación.
Material para el encofrado
Los materiales para fabricar el encofrado pueden ser muy diversos: metal, madera, contrachapado impermeable, paneles de MDF, plástico.
En el contexto de la construcción de una vivienda propia, para el vertido del fundamento se utiliza tradicionalmente un encofrado de madera reutilizable. Consiste en paneles construidos con tablas ajustadas con precisión, de 25 a 40 mm de grosor. Se prefiere la madera de coníferas.
La cara de la tabla que entra en contacto con el hormigón debe estar bien lijada. Los clavos se clavan desde la cara lisa y se doblan sobre las vigas transversales de refuerzo. Las vigas se colocan cada 1,5 a 2 m. La anchura de las tablas no debe superar los 150 mm, ya que en tablas más anchas se forman grietas rápidamente.
Normalmente, el encofrado reutilizable y desmontable se compra entre constructores vecinos o se alquila de un artesano local. Esta circunstancia obliga a tratarlo con cuidado, aunque el fijado suele hacerse con clavos.
Fijación del encofrado metálico y combinado
El encofrado metálico y combinado desmontable se fija mediante tornillos de sujeción y tuercas. Los tornillos largos se pasan por los agujeros previamente perforados en las paredes. Para permitir su reutilización, se colocan dentro de trozos de tubos del diámetro adecuado, que también actúan como limitadores de la anchura del futuro fundamento.
Se puede envolver los tornillos con papel, una precaución que también facilitará su extracción del hormigón endurecido para su uso posterior.
Fijación del encofrado de madera
Los paneles fabricados con tablas ajustadas se ensamblan en una caja, unidos con listones de madera de sección aproximada de 50 x 50 mm. En la parte inferior del encofrado, un listón de refuerzo fija la distancia entre las paredes, en la parte superior se instala una tapa de madera. Su longitud depende del ancho del fundamento vertido, y su frecuencia coincide con los listones verticales en los que se han montado los paneles.
Recientemente, los paneles de encofrado de madera se refuerzan con soportes y nervaduras metálicos, lo que aumenta la solidez y prolonga su vida útil y su rotación. También es recomendable colocar una película de polivinilcloruro (PVC) dentro del encofrado antes de verter el hormigón. Esto lo hace más hermético y evita que la madera absorba humedad innecesaria.
