De una pequeña estudio a apartamentos de dos niveles (+ fotos antes)

Este pequeño estudio se encuentra en un antiguo espacio con uso industrial. Allí vive una familia de diseñadores: Irina y Artem Lutiy con su pequeña hija María. Al inicio del proyecto, el área de la vivienda era de 26 metros cuadrados. Con un espacio limitado, la pareja ideó un interior funcional con una cocina completa, dormitorio separado, oficina de trabajo y abundantes lugares para almacenamiento. El área de la vivienda renovada, incluyendo el piso atico, es de 44 metros cuadrados.

Lugar: Ciudad de Moscú
Área: 44 m²
Cantidad de habitaciones: 2
Altura del techo: 4,25 m
Baño: 1
Diseño: Artem e Irina Lutiy

Vivienda antes del remodo

Al comienzo del proyecto, se trataba de apartamentos con acabado white box. Fueron completamente renovados ya que la construcción de un segundo piso requería instalaciones eléctricas hacia arriba y ciertos trabajos constructivos.

Fotos de la vivienda antes

Fotos de la vivienda antes

Para alojar todas las zonas funcionales necesarias en un espacio reducido, fue necesario construir un piso atico. En el nivel inferior se ubicaron el vestíbulo, cocina- sala de estar, baño, mientras que en el segundo nivel se encuentra la habitación principal, oficina de Artem y guardarropa.

En el interior se utilizaron tres tonos de gris que se repiten en las paredes, fachadas de mobiliario y elementos metálicos. En el suelo se colocó laminado en un tono claro de madera. El más complicado fue encontrar una configuración conveniente para la escalera que conduce al nivel superior. Al final, tuvo un diseño original con una entrada modificada. Las escaleras inferiores se usan como estantes prácticos.

El mueble de cocina fue hecho a medida. Es pequeño pero equipado con toda la tecnología necesaria y suficientes espacios de almacenamiento. Una solución creativa y funcional: luminarias de techo desmontables. Permiten dirigir la luz a las zonas necesarias, se pueden quitar fácilmente y reubicar en otros lugares.

Un destacado acento en la sala de estar fue el sofá amarillo hecho a medida según los bocetos de los diseñadores. Es plegable y sirve como espacio adicional para dormir. La pared detrás del sofá está decorada con rayas y tiene una bonita iluminación. A ambos lados hay almacenamiento en forma de mesilla y armario empotrado. Junto a la ventana se colocó una mesilla colgante con proyector. El espacio sobre ella se usa como pantalla para ver películas. Las cortinas blackout tienen control eléctrico.

En el suelo de la habitación principal se colocó un vinilo de cuarzo fino, lo que ayudó a conservar centímetros adicionales de altura. Para cubrir la viga sobresaliente y ocultar el frío del concreto, la pared detrás de la cama se decoró con un colchón suave que cubre toda la pared. La cama tiene mecanismo elevador y una caja espaciosa. A ambos lados de la cama se preveen sistemas de almacenamiento.

Detrás de la viga se colocó la oficina. Solo cabían una mesa y una computadora grande. Artem previó iluminación inferior que no distrae durante el trabajo productivo. Frente a la oficina está la zona de almacenamiento con muchas secciones hechas a medida para guardar cosas.

Para el suelo del pequeño vestíbulo se usó un cerámico práctico y resistente al agua. La pared frente a la puerta de entrada está decorada con rayas. Para almacenar ropa de invierno se hizo una estructura metálica transformable, en la que también se colgó un espejo. A la izquierda de la entrada hay cajones deslizables para diferentes accesorios.

El baño combinado tiene solo 3,3 metros cuadrados. Pero aquí se logró colocar todo lo necesario: ducha, instalación, lavamanos con espejo, mesilla, máquina de lavar y cestas colgantes suaves para almacenar ropa.