Cómo integrar flores en macetas en el interior: 6 consejos del experto

En los últimos años, las plantas en macetas han dejado atrás los marcos de ventana y se han convertido en un elemento integral del diseño del interior. Todo comenzó en pleno auge de la pandemia, cuando las casas se convirtieron repentinamente en oficinas, gimnasios y espacios de ocio. Para mantener la sensación de acogedor, presencia viva y comodidad, muchas personas se volvieron hacia las plantas y desde entonces no han querido desprenderse de ellas.

Según datos de minoristas y marketplaces, desde 2020 la demanda de flores decorativas ha aumentado casi al doble, junto con accesorios, macetas y estructuras colgantes. Pero la principal razón de su popularidad es la conexión emocional: las plantas se convierten en "mascotas verdes" que responden al cuidado, sin requerir mucho tiempo.

Svetlana Gorkunova Experta en flores Directora del área floral del Grupo Empresarial «Gorkunov»

Acento interior: el estado de ánimo expresado en verde

Las plantas decorativas se integran fácilmente en diferentes estilos. Lo principal es elegir cuidadosamente al "compañero verde" que realce el carácter del espacio.

• Orquídea: opción para quienes prefieren minimalismo y arte decorativo: líneas finas y paleta noble refuerzan la sensación de rigor y gráfica.
  
• Ficus: aporta textura y volumen, especialmente en espacios nórdicos, eclécticos o bohemios.
  
• Rosa: acogedor y romántico: ideal para estilos provenzales, clásicos o rústicos.
  

Foto: Designed by Freepik Color y forma: cómo las plantas interactúan con la composición

Las plantas vivas pueden transformar suavemente la percepción del espacio. Las líneas curvas de la orquídea suavizan la geometría estricta del interior. Las flores densas de calathea o azalea se convierten en acentos brillantes, especialmente en una paleta neutra.

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El ficus puede cumplir varias funciones: dependiendo de la variedad, puede parecer una escultura que añade profundidad a la composición. El elemento actúa como fondo y también como punto visual principal.

Macetas como parte del diseño

Elegir una maceta adecuada es como seleccionar un accesorio acertado. Cerámica mate en grafito resalta la urbanidad, el vidrio transparente hace que la orquídea parezca más ligera y la terracota cálida potencia la sensación de acogedor.

Si en la casa hay mascotas o no hay suficiente espacio, opta por macetas colgantes. No solo ahorran espacio, sino que crean el efecto de "jardín flotante". Especialmente bonitas son las composiciones en los marcos de ventana o sobre la mesa del comedor.

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Escenarios florales: la planta según la función

Las plantas pueden seleccionarse no solo por estilo, sino también por funcionalidad.

• Para delimitar espacios, se recomiendan ejemplares grandes: ficus, monstera o palma. Ayudan a definir límites en espacios abiertos y estudios.
  
• Calathea, azalea o begonia: estado de ánimo: tonos intensos revitalizan la zona de descanso o comedor.
  
• En habitaciones pequeñas, mejor se ven composiciones individuales: por ejemplo, orquídea en vidrio o maceta miniaturizada.
  

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Para la cocina, se recomiendan plantas resistentes: chlorophytum, calathea o maranta. Colócalas lejos del vapor y la llama abierta; ideales son las estanterías abiertas junto a una ventana o estructuras colgantes.

Estética en el marco y en la cotidianidad

Las flores en macetas no solo animan el interior, sino también la imagen. Un ficus en una esquina o una azalea ordenada sobre una mesa de centro completan el marco: ya sea como fondo para una reunión Zoom o una foto para redes sociales.

Además, los acentos verdes añaden individualidad: a través de las plantas, el espacio "cuenta" la personalidad del dueño, sus gustos y costumbres. Esta es una estética que sigue siendo importante tanto en el marco como en la vida.

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Un regalo que permanece en el interior

Una planta en maceta no es solo un regalo, sino una adición al interior. Llena el vacío, aporta calidez y puede permanecer durante meses o incluso años.

Elige una planta con miras al estilo del interior:

• Nórdico: ficus o sansevieria;
  
• Ecléctico: calathea;
  
• Interiores aireados: orquídea.

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Las flores en macetas ya no son una moda, sino una nueva norma. Cada vez más diseñadores incorporan plantas desde el principio del proyecto, junto con iluminación, textiles y objetos artísticos. Al igual que cualquier otro elemento decorativo o mueble, resuelven tareas específicas del diseño: delimitan espacios, añaden textura, mantienen el estilo y crean ambiente.

Además, es una alegría que puedes regalarte sin salir de casa. Por eso las plantas en macetas son must-have, con las que no quieres despedirte.

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