Tecnologías en la casa de Irina Bezhukova: lo que nos sorprendió

Cuando visitamos a Irina Bezhukova, esperábamos encontrar una sencilla casa rural acogedora. Sin embargo, nos encontramos con un espacio lleno de tecnologías modernas. Te contamos sobre las soluciones más interesantes.

Lo principal de la entrada:

• Una casa de 66 m² construida con tecnología de estructura de madera;

• Se utilizó un sistema innovador de calefacción;

• Las ventanas panorámicas no generan pérdidas de calor;

• Se diseñó una inteligente solución de seguridad;

• Todas las soluciones en la casa son eficientes energéticamente.

Calor inteligente

En lugar de las habituales radiadores, se usa un compresor de calor que parece un aire acondicionado. En verano lo enfria y en invierno calienta. “Pones la temperatura deseada y ya no tienes que preocuparte”, explica Irina. El sistema mantiene automáticamente un microclima cómodo.

Bajo el suelo, calefacción infrarroja. Lo probamos nosotros mismos: incluso en un día frío puedes caminar descalzo. A diferencia de los radiadores tradicionales, no seca el aire.

Ventanas sin pérdidas térmicas

El vidrio panorámico en una casa rural normalmente implica altas facturas de calefacción. Pero no en este caso. En las ventanas se usa un gas especial entre los cristales para retener el calor. Lo probamos nosotros mismos: incluso pegado al cristal no sientes frío.

Seguridad sin vallas

Una solución interesante: se optó por no usar vallas y en su lugar una inteligente solución de seguridad. Cámaras instaladas alrededor del terreno están conectadas a su teléfono. “Puedes revisar en cualquier momento lo que ocurre alrededor de la casa”, comenta la actriz.

Tecnología japonesa

Una gran orgullosa es la furoya, una tina de baño japonesa en el patio. Se usa un sistema avanzado de calentamiento del agua que mantiene la temperatura durante mucho tiempo. Puedes disfrutar de las estrellas incluso en invierno.

Por qué esto funciona

El secreto principal es un buen diseño. Antes de instalar cada sistema se hicieron cálculos. “Consulté con un especialista en supervisión técnica que revisó cada etapa de la construcción”, comparte Irina.

Lo que resultó al final:

• Una casa con muy poca pérdida de calor;

• Un microclima cómodo sin configuraciones complicadas;

• Seguridad sin vallas pesadas;

• Cuentas razonables por servicios públicos.