Cómo elegir la pintura para las paredes: 7 pasos correctos

Empieza pensando en qué colores te gustan y cuáles te molestan, con anticipación, sin ahorrar dinero en muestras de pintura y basa tu paleta cromática del apartamento en tonos neutros —sugiere Dasha Ukhlinova.

Dasha Ukhlinova DISEÑADORA DE INTERIORES
Se graduó en la Escuela Moderna de Diseño e hizo prácticas en Teplitskaya School. Hace algunos años abrió Dasha Ukhlinova Studio1. Elige el color de las paredes después de haber elegido la mobiliario y el decorado

Yo sé que parece más correcto elegir primero la pintura, pero en realidad es mucho más fácil elegir el color de las paredes que se ajuste a tu mobiliario y decorado, que al revés.

2. Comienza con la inspiración

Recorta imágenes de revistas que te gusten, imprime las imágenes que te capturaron del internet. Haz una «tablero» separado para cada habitación y empieza a «pegar» las imágenes. Cuando tengas una cantidad razonable, al menos 5-6, ya podrás sentir el estilo general y el color que mejor te conviene.

3. Basa tu elección en colores neutros

No digo que debas evitar los colores brillantes y saturados, pero al principio simplemente decide dónde y en qué quieres hacer un énfasis en tu habitación. Si tu respuesta es las paredes, todo lo demás en la habitación debe ser neutro. Por eso mismo, por ejemplo, los colores atrevidos en el baño pueden funcionar muy bien, porque todo lo demás en el baño ya es neutro (blanco).

Si te resulta difícil entender qué colores te gustan y en cuáles te sentirás cómodo, ve en reversa: determina primero qué colores definitivamente no te gustan, luego cuáles quizás no te gusten y así sucesivamente.

4. Usa muestras

Compra muestras de varios colores/tonos y pinta una superficie suficientemente grande en diferentes paredes. Así podrás ver cómo se comporta ese color dependiendo de cómo cae la luz. Si temes pintar directamente en las paredes, recorta pequeños trozos (mínimo formato A3), por ejemplo de cartón yeso y píntalos.

Prueba usar diferentes tonos del mismo color en una misma habitación. Pinta los acentos con uno o varios tonos más claros o oscuros que el color principal. Esto añadirá profundidad al espacio.

5. Relaciona los colores con el textil y el color del mobiliario

El color debe probarse no solo en la pared, sino también imaginarse cómo se comportará combinado con el mobiliario que estará en la habitación y con los tejidos, por ejemplo las cortinas. 

6. Elige la base adecuada – con brillo o sin él

Cualquier brillo en la pintura acentuará las imperfecciones, así que si intentas ocultar algo, usa una base de pintura lo más mate posible. Aquí hay algunas recomendaciones generales para diferentes tipos de acabados:

Totalmente mate: sin brillo en absoluto. Es ideal para habitaciones con baja circulación, como dormitorios. También es adecuada para techos.

Medio mate (20–25%): tiene un poco de brillo. Excelente opción para zonas con moderada circulación, como la sala de estar. Se puede limpiar con un paño húmedo y suave producto de limpieza.

Medio brillante (40%): tiene más brillo y funciona bien en espacios con alta circulación y ambientes húmedos. La pintura es fácil de limpiar, por eso es ideal para cocinas y baños.Brillante (más del 70%): brillante como el vidrio. Perfecto para superficies con alta circulación (como barandales) o para mobiliario.7. Crea una paleta cromática uniforme en toda la casa

No significa que debas pintar toda la casa con el mismo color, pero los espacios que se ven entre sí deben armonizar cromáticamente. Si no sabes cómo combinar colores, usa la combinación más simple: el uso del mismo color en diferentes tonos. Por ejemplo, si haces la entrada un poco más oscura y la sala de estar un poco más clara, automáticamente la sala parecerá más espaciosa y luminosa.