52 m² bajo el cielo sueco: apartamento de dos niveles en ático

El apartamento de dos niveles con grandes ventanas se decoró en estilo escandinavo y con una paleta de colores blanco y negro estándar. La combinación de contrastes clásicos es una excelente técnica para delimitar espacios.

Para suavizar el interior monocromático, decidieron incorporar plantas verdes.

La cocina recibe la mayor cantidad de luz natural, con cuatro grandes ventanas. También se presta atención a la iluminación artificial, con luminarias empotradas sobre la superficie de trabajo y en los nichos. Otra técnica para ampliar visualmente el espacio.

El delantal de tono gris oscuro evita que el blanco del mueble se confunda con las paredes. Por cierto, el sistema de almacenamiento está muy bien pensado: prácticamente toda la vajilla está escondida tras fachadas elegantes y minimalistas.

La combinación de contrastes evita que los colores claros se vuelvan blancos hospitalarios. Además, el parquet de tono cálido aporta al interior ese acogedor ambiente escandinavo.

La sala de estar está ubicada en el segundo nivel, lo cual es poco común: normalmente se reserva para la habitación principal. Sin embargo, la sala de estar resulta verdaderamente acogedora y tranquila.

En ella predominan tonos grises, mientras que la mesa de café negra y los marcos de posters mantienen la paleta general de blanco y negro.

La habitación principal está a la derecha de la escalera. A pesar de su pequeño tamaño, en ella hay una cama, un sistema de almacenamiento incorporado y hasta una silla que sustituye al retrete.

Además, el apartamento cuenta con un baño espacioso (algo muy importante para cualquier familia), un pequeño pasillo con un armario amplio para ropa y una salida independiente al patio, donde se pueden pasar tardes de verano envueltos en una manta.