Lo que debes saber si quieres pintar las paredes

Parece que no hay nada más sencillo que pintar paredes o muebles, pero en la práctica no es así. Te contamos los principales detalles y compartimos útiles consejos prácticos.

Elección del color

• Si no sabes qué color elegir, mira los tonos que ya tienes en casa. Por ejemplo, puede ser el sofá o uno de los colores del cuadro. Si el color combina con los objetos que te rodean, no te equivocarás.
• Lleva contigo varios ejemplares de pintura y prueba cómo se ven en el espacio. Acércalos a las paredes, suelos, muebles y otros elementos.
• Toma algunos prototipos de los colores que te gustan y haz muestras en una pieza de cartón de yeso. Observa cómo se ven los tonos en diferentes momentos del día y con iluminación artificial.

Brillante o mate?

• La pintura mate oculta bien las imperfecciones de las paredes y se distribuye uniformemente sobre cualquier superficie. Pero tiene un inconveniente: no se lava bien. Por eso es ideal para zonas de difícil acceso donde no quedarán marcas de manos ni muebles. Por ejemplo, para techos.
• La pintura aterciopelada tiene un ligero brillo y se ve más suave que la semibrillante. Es ideal para paredes.
• La pintura semibrillante o brillante refleja mucho, pero se lava bien. Es más adecuada para la decoración de estantes de cocina.

¿Cómo calcular la cantidad de pintura?

• Mide y suma el ancho de todas las paredes en la habitación. Multiplica ese número por la altura de una pared desde el suelo hasta el techo. De la suma total resta el área total de todas las puertas y ventanas.
• No olvides que la pintura debe aplicarse en dos capas, así que el número obtenido hay que duplicarlo.

Preparación para pintar

• Retira todos los objetos de la habitación que no planeas pintar.
• Cubre con cinta de pintor las ventanas, puertas, techos y molduras: todo lo que necesitas proteger de la pintura.
• Limpia las superficies con una solución especial para eliminar grasa.
• Repara las grietas en las paredes y el techo con masilla y lija suavemente.
• Retira el polvo después de lijado.
• Pinta con imprimación la superficie.
• Asegúrate de tener todas las herramientas necesarias para no interrumpir el trabajo a mitad de camino.

¿Cómo pintar correctamente?

• Baja desde arriba hacia abajo: comienza con el techo o la parte superior de la pared y avanza hacia el suelo. Incluso si la pintura gotea, no arruinarás las zonas ya pintadas.
• No pongas demasiada pintura en la brocha o rodillo, o se goteeará sobre el suelo. Pero tampoco te restrinjas: si pones muy poca pintura en el rodillo, tendrás que esforzarte más y tu mano empezará a doler.
• Aplica la pintura con movimientos rectos. Luego pasa por las zonas recién pintadas para distribuir uniformemente todo.

¿Cómo combinar varios tonos?

• Si quieres pintar muebles o añadir un gradiente en las paredes, avanza del claro al oscuro. Que la parte superior de los objetos siempre sea más clara que la inferior: los tonos claros dominarán. Los colores oscuros pesan los objetos y los 'suelan'.
• Juega con el contraste entre las paredes y el techo. Por ejemplo, un techo más claro añadirá aire al espacio. Pero los tonos oscuros también pueden verse interesantes y dar calidez al cuarto.