Casa pequeña para una familia grande: ejemplo de Australia

El cambio de Noruega a Australia con dos hijos es una decisión difícil, pero si estás apoyado por amigos, todo se vuelve más fácil. La pareja compró un terreno de 600 m² en Shenaton Park, un suburbio de Perth en Australia Occidental, junto con sus amigos.

La familia de amigos se estableció en una casa restaurada de los años 50. Nuestros protagonistas, Beck y James, construyeron una nueva casa en el terreno. No se pudo dividir la tierra en dos direcciones, por lo que la construcción auxiliar debía cumplir con las normas de vivienda auxiliar, como una casa de invitados. Al final, los protagonistas obtuvieron permiso para construir una casa de un solo piso con un área máxima de 78 m².

"Siempre vivimos compactos, por lo que las dimensiones modestas de la casa futura no nos intimidaron. Hubo un período en que vivimos en Noruega en la costa en un albergue. Su tamaño era de solo 55 m², pero nos sentíamos cómodos", — cuenta Beck.

Diseñaron y decoraron la casa por sus propios medios. Beck es egresada de la facultad de arquitectura, su esposo James es decorador de escenarios, por lo que la pareja se abordó con gusto y conocimiento técnico.

Beck dedicó 11 meses a planificar y aprobar el proyecto, y construyeron la casa en apenas ocho meses. En una pequeña área había que prever espacio para una vida cómoda de todos los miembros de la familia: padres, dos hijos y un gato. Inmediatamente después del traslado, la pareja comprendió que esperaban otro bebé. Pero la casa resultó ser conveniente incluso para una familia de cinco personas.

En la pequeña casa se logró organizar todas las habitaciones necesarias: dos habitaciones infantiles, dormitorio de los padres, lavadero y vestidor. Pero aún así el espacio no parece apretado: la distribución abierta, los techos altos con bóvedas y las puertas de vidrio hacia el jardín ayudan a ampliarlo visualmente. El alto techo permitió añadir el dormitorio de los padres dentro del cuarto, y en la habitación infantil también se pudo colocar la cama sin problemas.

La familia no tenía grandes recursos para la construcción, por lo que decidieron ahorrar en muchos aspectos. Por ejemplo, el exterior de la casa se recubrió con paneles de ciprés. Para la decoración interna usaron ladrillo que sobró del antiguo estadio Perry Lakes, construido para los Juegos de la Commonwealth en 1962.

En el interior hay mucha mueblería vintage. Por ejemplo, lámparas industriales General Electric de los años 70 que encontró en una tienda de segunda mano. Ahora decoran la zona de comedor al aire libre.

Uno de los elementos clave en la decoración fue el color amarillo. En tono, James y Beck, como verdaderos estéticos, se enamoraron después de la película "La niña de Rosmarie". En 2008 eligieron un amarillo cálido y oscuro para decorar su boda.

Después de muchos años, trasladaron ese color favorito al interior. La puerta de entrada, la escalera, los platos, almohadas e incluso el grifo en el baño: ese color ahora está presente por todas partes. La textura también no pasó desapercibida: aquí se quiere tocar cada detalle. En el interior hay mucha madera y textil. Una parte de la pared en la cocina se pintó con tinta para pizarra escolar — aquí los niños pueden dibujar.

"Lo que menos queríamos era que nuestra casa pareciera una nave espacial con muebles modernos incómodos. Buscamos específicamente cosas simples con historia que se ajustaran a nuestra percepción", — compartieron su idea principal Beck y James.