Cómo evitar la reconfiguración: un buen ejemplo de zonificación

Muchos diseñadores prefieren comenzar el proyecto de diseño con una reconfiguración compleja, pero los dueños de este apartamento de 87 metros cuadrados optaron por el camino de menor resistencia. En lugar de soluciones decorativas complicadas, aquí apareció una distribución concienzuda y minimalista con una única zona de sala de estar y cocina, sistemas de almacenamiento en el pasillo y dos dormitorios aislados.

Enfoque minimalista

La decoración del interior de este apartamento de tres habitaciones se distingue por la estricta linealidad en las terminaciones y un diseño de zonificación bien planificado: aunque la cocina y la sala de estar están en una sola habitación, el espacio está estrictamente dividido por funciones. La mayor parte del área está ocupada por la zona de sala de estar con un sofá y una mesa auxiliar, a lo largo de la pared lateral se colocó un gabinete de cocina lineal, y entre ellos se situó una mesa para comedor, delineando los límites de la zona con una alfombra.

Para no sobrecargar el área habitable con armarios, los sistemas de almacenamiento se colocaron en el pasillo: un largo armario de vestir blanco con múltiples secciones se extendió a lo largo de ambos dormitorios.

Experimentos moderados

El estilo nórdico a menudo se utiliza como base para decorar apartamentos modernos: ligero y claro, ayuda a ampliar visualmente el espacio y permite experimentar con la decoración. Los dueños de este apartamento en Estocolmo eligieron experimentos moderados: completaron la decoración blanca de la sala de estar con muebles de comedor claros, un sofá de cuero color caramelo expresivo y varios acentos grises.

Para no romper la unidad de la concepción minimalista del interior, los dormitorios se decoraron con un estilo similar: en ambas habitaciones están presentes las paredes de tono oscuro – mora y chocolate, además del iluminación principal se previeron lámparas adicionales y lámparas de noche.

Balcón de invierno

El plus indiscutible de la distribución del apartamento fue el amplio balcón semicircular con vista al lago. Para complementar el interior con acentos naturales, se creó un invernadero con plantas que resisten el clima ártico.

Además, en el balcón panorámico con cristal se organizó un área de descanso donde es cómodo estar todo el año: una mesa con sillas altas permite organizar ocasionalmente cenas familiares o veladas privadas. Para calentar el espacio, se colocó una alfombra en el suelo y se decoró el interior con pieles y mantas: a pesar de la solución cromática moderada, el diseño del balcón resultó vivo y acogedor.