Sol y brisa marina en el interior de una casa en Estados Unidos

Las tonalidades de turquesa, amarillo y color leche se combinaron para crear este interior suave pero también vibrante en Estados Unidos. La combinación de paredes coloridas con muebles de tonos suaves a la vez que revitaliza y acuna, siendo un excelente compromiso. El diseñador jugó con los acentos: algunos elementos de muebles, cuadros, marcos de lámparas son negros o marrones oscuros, lo que resalta las formas y hace que el interior sea más contrastante sin permitir que los elementos se mezclen con la decoración. En una casa donde los colores, texturas y volúmenes están tan cuidadosamente pensados, es agradable estar aquí, incluso se siente que se respira más fácilmente. Además, definitivamente aquí vive el verano: la temporada más feliz, ligera y sin preocupaciones.