Casa rural en Argentina

La casa Mach House es una vivienda rural para residencia permanente de la estudio Luciano Kruk, ubicada en Macha, en la zona norte de Gran Buenos Aires, Argentina.

El diseño de construcción con muros laterales casi opacos fue desarrollado según la estrategia del estudio, exponiendo el cuerpo desde la fachada y parte trasera, creando así vistas adicionales entre la calle y el jardín en profundidad. Las distintas zonas habitacionales se distribuyeron según una cuadrícula ortogonal, con el módulo central colocado en un espacio abierto interno con piscina reflejante, tierra sin cultivar y vegetación intacta. La luz solar entra a este módulo abierto a través de una abertura en el techo, y la superficie del agua dentro refleja los rayos solares produciendo diversos efectos luminosos durante el día, trayendo una atmósfera tranquila e íntima al interior.

Todo el diseño se materializó en aluminio anodizado de color bronce oscuro y doble acristalamiento. Para mayor privacidad, la piscina separa la casa de la calle, y junto a la ventana del dormitorio se plantaron especies acuáticas. En su forma abierta, grandes paneles correderos de vidrio en la parte trasera conectan los espacios internos con un balcón que se extiende más allá del área habitable hacia el espacio verde.

Las zonas parcialmente cerradas frente a las superficies transparentes regulan tanto la cantidad de luz solar directa como la pérdida de calor. Además del control pasivo solar previsto por la arquitectura misma, se instala un sistema de aire acondicionado y suelo radiante.

La parte trasera del edificio puede presumir de una vista panorámica sobre el denso bosque que crece a su alrededor. Considerando la posibilidad de que con el tiempo los paisajes puedan cambiar debido al crecimiento de la urbanización, se ha creado un pequeño espacio verde con piscina reflejante.

La sensación de protección generada por la naturaleza rocosa del concreto y su monotonía, refuerza la atmósfera de la casa y la percepción de efectos luminosos, aire y aromas.

Fotos: Daniela Mac Adden