Casa inteligente en los suburbios de Sídney

Limitadas por una forma restrictiva y poco práctica del terreno, así como por la preferencia de los clientes por el diseño solar pasivo y la iluminación natural, los arquitectos lograron crear una residencia de dos plantas con un área de 344 metros cuadrados, cuyas principales características son una piscina con pared transparente que conecta su espacio con el de la sala de estar, y una envoltura exterior del edificio en forma de jardín vertical.

Actuando como una conexión visual entre el espacio interior y exterior, la piscina refracta la luz natural, llenando toda la casa con destellos de agua. La piscina fue inicialmente construida como una estructura de concreto, y posteriormente se integró una pared acrílica con un sistema de impermeabilización cuidadosamente planificado.

El jardín vertical se realizó mediante pantallas especiales y accesorios hechos a medida para plantas. Protege el espacio del hogar de miradas ajenas desde la calle y está equipado con iluminación LED.

La residencia cuenta con un sistema de automatización doméstica. El cliente puede elegir entre una amplia gama de configuraciones preprogramadas para la iluminación y el sonido, además de establecer sus propios «escenarios», que serán controlados con un solo toque. Estos pueden activarse incluso de forma remota.

Fotos: Murray Fredericks, Clinton Cole, Ryan Ng