Encanto de una casa antigua

Una casa rural antigua puede ser acogedora y cómoda, lo importante es colocar bien los énfasis y llenar el espacio con objetos que encajen con el espíritu del lugar. Este interior español es precisamente así: agradable, acogedor y, lo más importante, auténtico. En algunos lugares pintaron las paredes y las vigas de madera en blanco, reforzaron el suelo, agregaron azulejos rústicos y llenaron la casa con elementos decorativos. Y así, el antiguo coto ya no se reconoce. Esta casa es usada por sus dueños como finca, pero también podría convertirse en una vivienda permanente. ¿No es cierto que aquí hay algo mágico y atractivo, por ejemplo, este maravilloso jardín que se sumerge en llamas por las noches? ¡Es perfecto!