Villa Blanca en Tel Aviv

Durante la construcción de esta casa en 1948, el arquitecto Shmuel Barkai se inspiró en las obras del gran Le Corbusier. Y el edificio realmente se parece a los proyectos del maestro famoso: bloques de volúmenes con columnas, techos terrazas, vitrales geométricos y color blanco. Más tarde, el edificio fue convertido en hotel, que ahora se llama White Villa. El hotel se posiciona como un oasis tranquilo en el centro de una megaciudad ruidosa.

Y es difícil no estar de acuerdo con eso: el color blanco en el entorno de plantas verdes relaja realmente, y la atmósfera lenta que reina en el hotel aún más prepara para el descanso. El interior es elegante y discreto; la clásica estética blanco-negro rara vez cede el paso. En algunos cuartos hay un pequeño patio interior donde se puede desayunar cómodamente por la mañana y leer un libro por la noche. Además, el hotel cuenta con un excelente restaurante y una terraza en el jardín.