Vive una experiencia única acampando en una iglú de diseño

Sí, hablamos de nieve porque las cúpulas que conforman este hotel están a una altura de 1800 metros en la zona conocida como Anait. Llegar allí solo es posible a pie, en esquí durante el invierno o con la ayuda de una máquina Ratrack que transporta tu equipaje al complejo.

La experiencia de dormir en este lugar es única. Las cúpulas están completamente equipadas para que no sientas cómo la temperatura exterior baja por debajo del cero.

Para ello, el estilo escandinavo del interior, con una gran cantidad de madera y cuero, te hará sentir más cómodo que en casa mientras disfrutas del aislamiento y el increíble paisaje de las montañas nevadas de Aragón. Cada una de estas cúpulas tiene 35 metros cuadrados, y dentro hay una cama colocada frente a un gran ventanal desde el cual puedes ver las estrellas o observar el amanecer entre las cimas nevadas. Por supuesto, cada iglú tiene baño, y en el nivel superior de cada una hay un ático accesible mediante una escalera de madera, si decides llevar a los niños.

También, si te preocupa el frío, no lo hagas. Además de haber sido diseñadas con sostenibilidad en mente (además de estar instaladas sobre estructuras removibles sin fundación ni concreto, fueron diseñadas para eficiencia energética, para absorber el calor de los rayos solares durante el día y mantener las habitaciones frescas por la noche). Además, tienen chimeneas de pellets para garantizar calor y mantener una temperatura interior constante.

Para cenas gastronómicas y desayunos, Las Mugas cuenta con otro cúpula que funciona como restaurante, también perfectamente decorado, donde sirven desayunos y cenas gastronómicas dominadas por los sabores de productos tradicionales de la cuenca del río Tena.