Estante para radiador — un accesorio elegante y práctico

¿Para qué colocar un estante en el radiador?

Un estante para radiador ofrece múltiples ventajas. Además de ocultar el radiador, también libera espacio, algo muy útil en apartamentos pequeños.

Protege las paredes

En primer lugar, protege la pared de los daños causados por el calor. ¿Alguna vez notó manchas grises en la pared justo detrás del radiador? Entonces el estante será su aliado más valioso si quiere evitar eso.

Evita la obstrucción

¿Quién dice que los radiadores están limpios? Si están sucios, funcionan peor. El estante también los protege de la polvareda, lo que representa otra ventaja.

Tiene mucho espacio para almacenar

Por lo tanto, instalar estantes para radiadores permite colocar diversos objetos: libros o pequeños elementos decorativos. Pero no coloque plantas verdes en el estante, ya que el calor puede ser demasiado para ellas.

¿Cómo se instala un estante para radiador?

Hay dos maneras de instalar un estante para radiador. Puede fijarlo a pernos normales o invisibles, o simplemente colocarlo directamente sobre el radiador. Si elige esta última opción, es mejor usar un estante pesado (como de piedra natural o mármol), y tener en cuenta el peso de los objetos que colocará encima. Esto hará que el estante sea más estable.

Tenga en cuenta que también existen otros tipos de estantes con fijaciones integradas, que permiten montar sin perforar las paredes.

Protección para radiador — otra opción

La protección para radiadores, que luce mucho más estética, se usa en los interiores más elegantes. Gracias a su panel frontal abierto, por el que pasa el calor, son tanto funcionales como decorativos. Incluso usar corteza como material puede añadir un estilo antiguo.

Aunque la protección para radiadores luce muy atractiva, no transmite calor tan eficientemente. Para mantener realmente eficiente el sistema de calefacción en invierno, es mejor elegir un estante para radiador.