Consejos para el mantenimiento del techo que todo dueño de casa debe conocer

1. Limpieza regular del techo

Programa una limpieza profesional del techo al menos una vez cada dos años. Retiran hojas y basura que pueden dañar el techo al descomponerse. Durante la limpieza también inspeccionan y realizan los trabajos de reparación necesarios. Sin embargo, programa este servicio antes si notas crecimiento de moho, desagües obstruidos o tejas agrietadas. La limpieza profesional del techo en Bellvue puede ayudarte a eliminar el moho y las algas para prevenir daños adicionales al techo.

2. Aplicación de protección contra radiación UV

En zonas de alta montaña se observa mayor exposición directa a los rayos del sol, perjudiciales para el techo. La radiación UV provoca la degradación de las tejas y, finalmente, su desintegración. Como medida preventiva, aplica un producto protector contra la radiación UV en el techo. Esto crea una barrera sobre las tejas que filtra los rayos solares dañinos.

El producto protector no solo prolonga la vida útil del techo, sino que también mejora su apariencia. Algunas membranas ofrecen protección contra la humedad y tecnología de enfriamiento del techo que refleja la luz solar y el calor.

3. Poda de árboles y plantas

Corta los árboles y plantas alrededor de la casa, ya que pueden caer y dañar el techo. Las ramas colgantes también interfieren con la circulación del aire en el ático. El aire estancado crea un entorno ideal para el crecimiento de moho y hongos. Además, la vegetación excesiva aumenta la probabilidad de que roedores u otros animales encuentren refugio en el ático. Deja que un arborista profesional realice la poda para evitar daños a tu propiedad.

4. Revisión de filtraciones y grietas

Revisa regularmente el techo en busca de filtraciones y grietas, ya que estas disminuyen la calidad del aire interior. El agua entra a través de las grietas, dañando el aislamiento térmico y las vigas de madera. Como el problema puede no ser visible desde afuera, entra al ático y revisa si hay manchas de agua en el techo. Si observas crecimiento de moho, podría haber un problema con el agua. Contrata inmediatamente a un techador para reparar filtraciones y grietas.

5. Reemplazo de tejas dañadas

Las tejas protegen el techo de los rayos solares directos y las duras condiciones climáticas. También mejoran la apariencia del techo. Con el tiempo, las tejas son afectadas por los elementos y se desgastan. Como resultado, pueden desprenderse, dejando el techo expuesto. Revisa las tejas y reemplaza las dañadas. Presta atención a las áreas calvas, ya que indican un desgaste excesivo.

6. Eliminación de nieve y hielo

La nieve y el hielo se acumulan en el techo y forman masas que pueden dañar las tejas. El peso también ejerce presión adicional sobre el techo, lo que puede causar colapsos. Para evitar esto, elimina la nieve y el hielo lo antes posible. Puedes hacerlo tú mismo o contratar a una empresa profesional de techos.

Durante el invierno, revisa regularmente el techo en busca de presas de hielo y toma medidas para prevenir su formación. Ten en cuenta que un ático bien aislado y ventilado evita la formación de presas de hielo.

Conclusión

El tipo de techo determina el tipo de mantenimiento que requiere. Por ejemplo, los techos metálicos necesitan un cuidado diferente al de las tejas asfálticas. Sin embargo, estos consejos son una excelente base para cualquier dueño de casa. Siempre consulta con un especialista en techos para evitar errores que puedan dañar tu techo.