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Oficina en casa
Protección, fortaleza… todo se trata de la casa. Pero la casa también es un lugar de trabajo. Aunque no solo para la anfitriona del hogar.
A veces llevamos el trabajo a casa o los estudiantes hacen sus tareas en casa. Algunos trabajan desde casa.

Lamentablemente, no todas las viviendas permiten dedicar una habitación entera al despacho. ¿Qué hacer entonces? Es posible crear un espacio de trabajo incluso en una vivienda de una sola habitación. Hoy veremos cómo distribuir correctamente el espacio para la zona de trabajo.
Para ello, es necesario reservar parte del espacio (tomar una pared) y colocar allí un armario empotrado y un escritorio que se puede comprar en una tienda de muebles o hacer a medida. Todo esto puede ocultarse con una cortina.
La opción ideal es que la cortina esté hecha con el mismo tejido que las cortinas de las ventanas.
De esta manera también se puede ocultar una nicho si existe en la habitación.
Así, al trabajar desde casa, se obtiene un despacho individual en el que se puede colocar documentos, papeles, cajas, computadora y otros artículos necesarios para el trabajo.

Después de terminar el día laboral, simplemente cierra la cortina. Si la cortina es de la misma tela que las cortinas de ventana, se crea una ilusión de una segunda ventana en la habitación. Esto permite aumentar visualmente el espacio.
Ahora puedes ver que trabajar desde casa puede ser una experiencia agradable.

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